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¿Cuándo hay que comprar el vestido de novia?

Una de las grandes preguntas que toda mujer se hace a la hora de casarse es cuándo tiene que comenzar a mirar vestidos de novia. ¿Qué plazos necesita para que todo vaya con tiempo, sin prisas y con capacidad para solucionar cualquier imprevisto? ¿Te suena de algo esta situación o este sentimiento de intranquilidad? No te preocupes. No eres la única.

Hoy en día, cada vez son más las parejas que empiezan a organizar su boda con bastante tiempo de antelación. ¿Lo ideal? Entre 9 y 12 meses. Si es más, iréis con tranquilidad. Menos plazo puede ser algo estresante, sobre todo para la novia.

En nuestra experiencia, tener un año por delante es suficiente para poder vestirnos de arriba abajo para ese día tan especial. ¿Qué es lo primero que tendremos que hacer? Mirar, mirar y mirar. Y descartar, descartar y descartar. ¿Te has parado a observar la cantidad de opciones que hay? Son muchísimas. Tienes que encontrar tu estilo, aquel que mejor te sienta o con el que más cómoda te sientas.

Hay algunos vestidos de novia que son, simplemente, impresionantes. Te dejarán sin respiración o te imaginarás al instante en uno de ellos para tu boda.

Una vez que hayamos decidido cuál es nuestro estilo, será momento de pedir citas y visitas las boutiques de novias. Si eres especialmente indecisa, tendrás que acudir a varias, pedir opinión, asegurarte que alguien más te acompañe, alguien que sea de confianza y que te pueda dar una opinión sincera.

La reserva del vestido deberá hacerse con un mínimo de seis meses de plazo. Así, tendrás suficiente tiempo para ir realizando todas las modificaciones que desees, así como distintos arreglos.

A lo largo de las siguientes semanas, tendrás que ir completando el look con el resto de complementos. Los principales son los zapatos, pendientes, anillos… ¡No te olvides que el peinado y el maquillaje también deberán ir en la misma sintonía!

Lo habitual es que un mes antes del enlace se realice la prueba definitiva del vestido. Es aquí cuando todo quedará perfectamente cuadrado. Solo queda recogerlo, que se hará unas dos semanas antes. Te aconsejamos volver a probarlo para comprobar que todo está perfecto, hasta el último detalle, y que nuestro vestido de novia es el que siempre habíamos soñado.